Las fichas de los cinco arrestados ayer, que forman parte de 12 acusados como presuntos autores de la masacre que se escenificó el 29 de julio del 2022, en los predios del Residencial Juan César Cordero Dávila (Quintana), en Hato Rey, que cobró la vida de cuatro personas, fueron diseminadas hoy por la Policía.
Los arrestados fueron identificados como Juan José de la Cruz Natera, apodado “Gordo”, de 31 años; Jesús M. Laureano Pérez, de 34, apodado “Mono”; Luis M. Olivo Moran, de 22, alias “Luismelo”; Michael F. Sánchez Ogando, de 27, alias “Panda”, y Moisés Serrano de Jesús, de 34, apodado “Bebote”.
Los cinco fueron sumariados en la cárcel de Bayamón cuando no prestaron las fianzas millonarias que les impuso la jueza Iraida Rodríguez Castro, que ascendieron a $56.1 millones contra los 12 imputados.
Los agentes de Inteligencia y Arrestos que detuvieron a los imputados ocuparon una pistola Glock, siete cargadores y 94 balas. También incautaron teléfonos celulares y computadoras que les fueron entregados a agentes federales.
En la lista de los acusados figuran Juan José de la Cruz Natera, primo del otrora líder de Las FARC, Vladimir Natera Abreu, hoy encarcelado en una institución federal; Jairo (Primo) Sánchez Medina; Pedro Juan Santiago Rodríguez, que fue persona de interés en la investigación del asesinato del trapero Kevin Fret ocurrido el 10 de enero del 2019 en Villa Palmeras, caso que no ha sido esclarecido; Anderson Bierd Melo; Michael F. (Panda) Sánchez Ogando; Jesús Manuel (Mono) Laureano Pérez; Alberto (Pelota) Valdez; Juan Rafael (Martillo) Concepción Mercado; Pablo José Verdejo Suarez; Moisés Serrano de Jesús y Yanzie Vázquez González.
De la Cruz Natera figura entre varios individuos arrestados el pasado 6 de diciembre en Barrio Obrero, en un operativo de la superintendencia auxiliar en Operaciones Especiales, en la que ocuparon armas y drogas. Al ser detenido, estaba en probatoria federal.
La investigación del múltiple asesinato en el que fueron acribillados los hermanos Dereck Ortega Gandía, de 23 años y David John Ortega Ayala, de 53; Diego Alexander Morales, de 22, y Raúl Ortiz Centeno, de 38, habría sido ordenada por elementos de las Fuerzas Armadas de Revolucionarias de Cantera, narco organización conocida como Las FARC. Los alrededor de 16 participantes dispararon más de 600 balas.
Según la investigación, dos de las víctimas habían sido citadas para una transacción de 20 libras de marihuana y cuando acudieron comenzó la balacera que entre sus víctimas dejó dos personas muertas ajenas a la disputa entre los narcos.
La masacre fue en venganza por hechos ocurridos el 25 de julio del 2022 en el residencial Quintana, cuando el caserío fue escenario del asesinato de Waldemar Vázquez Méndez, quien era sospechoso de varias muertes violentas, entre ellas la de una mujer en la calle Guayama. La masacre, según las teorías policiales desde un principio, pudo haber sido perpetrada por algunos de los amigos de Waldemar.
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