El escultor Carlos Guzmán participará en la exhibición “Valija iberoamericana” que estrenará el próximo 16 de septiembre en el Centro Cultural San Clemente de Toledo, en España. >Suministrada
“Perfiles de Don Luis A. Ferré” (1996) localizados en la Autopista Luis A. Ferré, en San Juan, una de las obras más reconocidas del escultor Carlos Guzmán. >Archivo
El escultor Carlos Guzmán participará en la exhibición “Valija iberoamericana” que estrenará el próximo 16 de septiembre en el Centro Cultural San Clemente de Toledo, en España. >Suministrada
Bajo el título “Valija iberoamericana”, ayer inauguró en el Centro Cultural San Clemente de Toledo, España, una ambiciosa exposición de pintura y escultura que reunió obras realizadas por artistas de diferentes países, Puerto Rico, incluido.
El objetivo de la muestra es conformar una exposición itinerante que pueda ser instalada y admirada en Toledo y en cualquier otro lugar de España.
La muestra cuenta con obras procedentes de más de 10 países iberoamericanos, cuyos creadores fueron escogidos por entidades artísticas representativas de cada uno de ellos.
El escultor puertorriqueño Carlos Guzmán es uno de los seleccionados para formar parte del importante despliegue del arte contemporáneo iberoamericano.
Guzmán, quien es natural de Luquillo y tiene a su haber más de tres décadas de quehacer artístico, presentó la obra “Mulata Antillana Danza”. La pieza escultórica forma parte de su colección Las Antillanas, que sirve de homenaje a la mujer antillana.
La colección presenta variantes como Antillana, Antillana Celeste, entre otras, que se caracterizan por exhibir colores vivos (amarillo, azul, rojo, etc.) que nos distinguen como caribeños. Sin embargo, en esta ocasión, Guzmán seleccionó la “mulata danzante” que exhibe tonos oscuros que aluden a nuestra afro-descendencia.
“Somos el producto de una mezcla de razas india, africana y española. Como resultado de esto somos lo que somos a nivel antillano, la lucha de la mujer antillana y su representación en la sociedad. Esta pieza destaca su carisma, capacidad para criar, ser educadora, empresaria y mujer. Sin dejar de un lado la sensualidad y ‘sandunguería’ casual, intensa y natural que se da como parte de esta mezcla de raza”, explicó el artista.
"Mulata Antillana, Danza" del escultor Carlos Guzmán, la obra que se quedará en Toledo, España, de forma permanente. >Suministrada
La obra está hecha en acero inoxidable con aplicaciones de pintura en poliuretano, tiene una dimensión de 28 pulgadas de alto, por 16 pulgadas de ancho y 8 pulgadas de profundidad. Lo que se considera como una serie de mediano formato.
Casualmente, la pieza “Mulata Antillana Danza” no fue un trabajo realizado particularmente para la exposición, sino un tema que el artista ya estaba trabajando.
“Como escultor caribeño y puertorriqueño, ante la invitación hice una aleación ahí que era indiscutible. España tiene mucho que ver con la presencia de nuestra cultura por las razones obvias de la colonización y la fusión que dio paso lo que somos hoy los antillanos. Así como a una cultura rica en costumbres y sabor. Así que dije: ¡perfecto! Estoy trabajando este tema y me parece relevante para exponerlo como muestra de nuestra idiosincrasia. ¿Qué mejor escenario que este para exponer?”, recordó el escultor sobre lo que opina fue una “causalidad”.
Al abordarle sobre como acogió la oportunidad de formar parte de los seleccionados para el proyecto Valija Iberoamericana como una colección de arte permanente, Guzmán lo describió como “muy grata”.
Carlos Guzmán junto a su obra la obra “Mulata Antillana Danza”, en la exposición Valija iberoamericana. >Suministrada
“La invitación fue muy pertinente después de pasar dos años de la pandemia —con la cual continuamos lidiando— en que básicamente se detuvo la gestión de intercambio cultural en términos presenciales. Particularmente, para artistas que como yo son empresarios del arte desde que comencé mi carrera, fue un reto el subsistir y mantener nuestro trabajo en este tiempo”, subrayó quien ha tenido la oportunidad de representar a Puerto Rico con su arte en múltiples ocasiones.
Guzmán cuenta con más de 60 proyectos de arte público en Puerto Rico y países como República Dominicana, México, Venezuela, Indianápolis, Nueva York, Grecia, Corea, entre otros.
“Cardúmen Onírico”, en la Plaza del Ancla, en Condado. >Archivo
Su estilo del arte, aunque con elementos de carácter terrenales, exploran de una manera íntima la metafísica y la espiritualidad.
Cabe destacar que, la obra de Carlos Guzmán, así como la del resto de los artistas procedentes de las dos orillas del Atlántico, fue cedida por los creadores para formar parte de la colección permanente y del inventario de patrimonio artístico del Centro Cultural San Clemente, en Toledo.
La iniciativa “Valija iberoamericana” apuesta por dar a conocer en Toledo el mejor arte contemporáneo y promocionar tanto a artistas consagrados como a nuevos valores. ¡Enhorabuena para Carlos Guzmán!
Cardúmen Para Un Jardín (1996), Segundo Simposio Internacional en el Jardín Botánico de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras.
SOBRE EL ARTISTA
Carlos Guzmán nació en 1968 en Luquillo, Puerto Rico. En 1986 ingresa a la Escuela de Bellas Artes de la Universidad de Puerto Rico para estudiar arte con una concentración en la escultura.
Actualmente, es considerado uno de los escultores más importantes de Puerto Rico por sus aportes a la creación y ejecución de importantes monumentos urbanos y públicos.
De hecho, críticos de arte, como Manuel Álvarez Lezama, lo han descrito como “un talento inmenso, una imaginación sin límites, una atracción por lo enigmático ya la vez bello, y un perfeccionismo en la ejecución de sus diversas obras tridimensionales, Carlos Guzmán es uno de los escultores contemporáneos más importantes de Puerto Rico”.
Más sobre el escultor
Carlos Rafael Vega Guzmán —su nombre de pila— ingresó a la Universidad de Puerto Rico en 1986, donde completó un Bachillerato en Bellas Artes con concentración en Escultura, de la Facultad de Humanidades de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras.
En 1987 ingresa al taller del maestro escultor Pablo Rubio, en el que permanece por ocho años, y donde trabaja en perfeccionar técnicas de escultura, obras públicas, dibujo y pintura. Entre los proyectos más importantes en los que Guzmán participó junto a Pablo Rubio se destacan: “Cristales de la Paz”, Sevilla, España 1992; “La Niña, La Pinta y La Santa María”, en celebración del Quinto Centenario del Descubrimiento de América 1992; y “Encuentro en Tiempo y Espacio”, Juegos Olímpicos Seúl, Corea, en 1988.
En 1991, Carlos Guzmán recibe el premio en escultura del Ateneo Puertorriqueño de San Juan y en 1992 participa como ayudante del Primer Simposio de Escultura Internacional del Jardín Botánico de la Universidad de Puerto Rico, en Río Piedras, con artistas de talla internacional como Carlos Cruz Diez y Amadeo Gabino entre otros.
“Perfiles de Don Luis A. Ferré” (1996) localizados en la Autopista Luis A. Ferré, en San Juan, una de las obras más reconocidas del escultor Carlos Guzmán. >Archivo
En 1993 recibe la invitación para ser artista residente en la Escuela de Artes de Altos de Chavón, creando por primera vez un taller de escultura en metal en esta institución, y en 1986 un gran jurado lo invita a participar del Segundo Simposio Internacional del Jardín Botánico de la Universidad de Puerto Rico, junto a escultores reconocidos como Jorge Du-Bon, Leopoldo Maller y Ted Carrasco.
La obra del escultor se ha exhibido de manera individual y colectiva en países alrededor del mundo: Corea, México, Venezuela, Francia (en la Sede de la Unesco), Grecia, Panamá, España y Estados Unidos (Nueva York, Indianapolis, Miami, Massachusetts y Connecticut), entre otras.
Actualmente Guzmán es considerado por la crítica en la Isla y la internacional como uno de los escultores más importantes de Puerto Rico, por sus ejecutorias al intervenir con esculturas en espacios urbanos y públicos tanto en Puerto Rico internacionalmente.
OBRA PÚBLICA Y MONUMENTOS
Desde 1996, Guzmán ha estado muy activo creando obras monumentales que ocupan importantes espacios en Puerto Rico y otras urbes artísticas del mundo. Antes de la llegada del nuevo milenio, el escultor se dio a conocer por sus magistrales piezas “Cardumen” (1996) Colección del Museo de Arte de Ponce, en Ponce; “Perfiles de Don Luis A. Ferré” (1996), en la Autopista Luis A. Ferré, en San Juan; “Vientos del sur” (1997), en Coamo; “Homenaje a Labra” (1998), en el Museo de Arte Contemporáneo, en Santurce; “Cardumen Onírico” (1998), en la Plaza del Ancla en Condado; y “Valle de los delfines” (1998), en el ParqueCentral de San Juan, entre otros.
Guzmán comenzó su andanza por el mundo de la escultura en 1987. >Suministrada
Las obras correspondientes al siglo 21 son:
• “Vuelo Astral” (2022), en Caribbean University, en Bayamón
• “Fundadores de Cayey” (2021), Plaza Pública, en Cayey.
• “Angelita Lind - Ángel de Puerto Rico” (2019), Parque de Pista y Campo, en Patillas.
• “Líderes” (2018), Conjunto de 10 esculturas alusivas a los alcaldes que han dirigido el destino del pueblo de San Lorenzo, localizado en la Plaza de los Alcaldes, en San Lorenzo.
• “Homenaje a la enseñanza” (2011), plaza dedicada a los maestros y maestras de Puerto Rico, ala sur del Capitolio, Cámara de Representantes, en San Juan.
• “Ñángaro” (2009), II Simposio Internacional de Escultura Urbana, Isla de Margarita, en Venezuela.
• “Próceres de Puerto Rico” (2008), conjunto de 16 esculturas instaladas en Patillas.
• “Espirales” (2008) Simposio Internacional, Isla Margarita, en Venezuela.
• “Reina Virgen” (2007), Universidad de Puerto Rico, Recinto de Carolina, en Carolina.
• “Perlas del Sur” (2207), Terra Señorial, en Ponce.
• “Memorias de un héroe” (2007), en el casco urbano de Luquillo.
• “Héroes” (2005), en casco urbano en Bayamón.
• “Mundos Paralelos” (2005), Simposio Internacional de Escultura Contemporánea en Madera, Museo de Arte Moderno de Guadalajara, Jalisco, en México.
• “Galatea” (2005), Hotel Marriott Court Yard, en Miramar.
• “Luna de Corea” (2005), Simposio Internacional de Escultura Contemporánea, Seúl, en Corea del Sur.
• “Volucris” (2005), Excelcior Tower, en Miramar.
• “Tintorera” (2003), Malecón de la Playa de Luquillo, en Luquillo.
• “Poesía” (2003), Primera Bienal del Cemento, en Caguas.
• “Visión de sueños” (2202), Super Acueducto, en Arecibo.
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